La vi caminar del otro lado del vidrio...

La vi caminar del otro lado del vidrio. Yo estaba tomando mi café con leche de la mañana y la reconocí. Me resulta difícil poder explicarte cómo lo hice, ya que nunca la había visto, pero supe que era ella con su vestido blanco y su larga cabellera rubia. Dejé el café con leche a medio terminar y salí corriendo a buscarla. No tuve suerte, habrá doblado la esquina, subido a un Taxi o tomado un colectivo. Extrañamente en ese momento me di cuenta que no era ella a quien buscaba, porque apareció una morocha de pelo corto con jean y musculosa blanca que me hizo dar cuenta que a veces uno cree que algo falló pero era parte del plan para lo que realmente debía suceder.