Parece todo normal cuando todo está por explotar...

Parece todo normal cuando todo está por explotar. Mi cabeza y mi corazón están de acuerdo que esto ya no da para más y cuando ellos están de acuerdo es porque algo importante está por empezar. Mi estómago es el que siente algo de temor y hace que sienta esos nervios que ni el corazón ni el cerebro pueden controlar.