Parecía que iba a llegar a doscientos treinta y dos, pero la rutina hizo que aparezcan nuevos desafíos también rutinarios y no pudo provocar ese record que sin saberlo por ahí hoy se puede alcanzar. Hoy, como ayer, me viene música de la pared. Para mí que es el vecino que pone muy alto el volumen de la televisión, porque la voz que suena es muy parecida a la de Jorge Formento. Para alterar un poco la situación me revelo y ya dejo de ser diapositiva para empezar a ser una foto que será desempolvada en el futuro.
