No hay mucho para decir...

No hay mucho para decir cuando se mira a la otra persona de una forma que demuestra todo lo que se siente. Sin embargo, en esos momentos pueden suceder dos cosas, o aparece una verborragia sin sentido, ya que no se dice lo que uno verdaderamente siente, o por el contrario, se produce un silencio cuya causa es un nudo en la garganta que deja a penas un leve espacio para que circule el aire. Ese nudo o esa verborragia se suelen solucionar con un simple contacto físico entre ambas personas, que dependiendo de la situación puede ser la unión de las manos, un abrazo, o un dulce beso.