Camino en un día soleado...

Camino en un día soleado, pero con un cierto viento fresco agradable, por la peatonal más transitada de la ciudad. Miro a toda la gente que me voy cruzando yendo para el lado contrario al que voy yo. Intento cruzar alguna mirada, pero me resulta muy difícil, cada uno va en su mundo, tanta gente sin ninguna conexión. Todos viviendo en el futuro o en el pasado, sus pensamientos los invaden y no les dejan vivir en ese presente caminando por aquel lugar. La veo venir a ella, mirando las ventanas de los edificios y yo creyendo que está intentando imaginar que historia hay detrás de cada una. A escasos metros de mi, baja la mirada, me mira, la miro, sonríe, sonrió, conectamos y cada uno sigue por su camino. A veces las historias de amor duran solo una mirada.