En el momento en que se admite la locura probablemente sea un momento donde la locura no se está expresando en su máxima expresión. Algunos dirán que en ese momento la locura empieza a ser pasado, pero a veces, sobre todo en las personas tan racionales, suele pasar que son conscientes un tiempo antes de que ese momento de locura extrema está por llegar. Eso no quita que por eso sean más capaces de evitarlo, solo que cuentan con esa información por estar sintiendo que ya están en un camino que se transformó como en una cinta transportadora. Podrán intentar volver atrás, pero en algún momento que se encuentren detraídos, o sin ser consientes muy bien de dónde están, volverán a acercarse a esa locura que como ellos sabían, era inevitable lograr escapar.