Finalmente tengo que admitir que mi parte pragmática...

Finalmente tengo que admitir que mi parte pragmática y racional fue derrotada. Siempre fui un gran defensor en las largas charlas de café de la no existencia del “alma”. Yo soy de los que tengo que ver para creer. Eso de que el alma es algo etéreo no lograba convencerme. Ningún científico ni médico lograba encontrar la existencia de eso que muchos llaman “alma”, y eso que era mi caballito de batalla en las discusiones, terminó siendo la principal razón de creer en su existencia. Hace unos días siento un gran dolor, una gran angustia, una tristeza caso permanente. Fui a varios médicos pero ninguno logró acertar qué y dónde se encontraba la causa de mi problema, hasta que recién, el último médico que visité me dijo ”El problema es que su dolor no es físico, lo que a usted le duele es el alma”.